Dibujo con acuarelas
Consejos para pintar con acuarelas
Usa como base pocos colores
Consejo fundamental para inexpertos (y no tanto), con la acuarela en todas sus técnicas posibles tienes que saber que menos es más y para ello valerse de una base corta o lo que es lo mismo, una paleta realmente básica es lo que te vamos a recomendar como primer punto a tomar en cuenta.
Tienes que saber que en el caso puntual de las acuarelas se necesita de contar con una base cómoda para establecer perfectamente una paleta bien adecuada. En este sentido, te damos como escogencia a una serie de tres colores de entre los cuales vas a dividir de una forma u otra desde los más fuertes hasta los más claros o viceversa, y por ello fíjate muy bien en que todos estos tonos se diferencien mucho.
Cuando hayas escogido esto, entonces llega el turno de que con el primer color escogido lo mezcles con tu pincel y un poco de agua para que con esta combinación entre todos, se consiga perfectamente una humedad. Luego de haber hecho este paso, te tocará hacer lo mismo con el segundo color, aunque la cantidad de agua será todavía menor y al final con el tercero te bastará con menos de lo hecho en gotas con el segundo.
Puedes optar por la dureza de color
Para algunos dibujantes, el hecho de sentirse abrumados por tanta cantidad de agua hace que la desechen o usen muy poco de ella si tomamos en cuenta a sus dibujos o pinturas y su lienzo se convierte en una extensión, así que vamos con unos sencillos tips sobre ello.
Si lo que quieres es generar un dibujo amplio y sumamente fuerte en donde predomine el color escogido, entonces lo que debes hacer es simplemente humedecer un poco tu pincel y pasar enseguida a sumergirlo en la acuarela y tu color elegido. Esto traerá como consecuencia que sea realmente duro el color escogido y que se note una espesura mucho más líquida en ese momento del dibujo.
Vamos con la segunda escogencia, ya esta tiene que ver directamente con los que prefieren más bien una tonalidad más líquida y donde sus dibujos mantengan una expresión más sencilla. Para este caso lo que debes hacer es mojar prácticamente el pincel en agua, lo cual va a crear un efecto realmente claro en el dibujo que estés haciendo y se pueda percibir en el resultado final. Recuerda no acercar demasiado el pincel al agua al momento de tener mucha agua para no empapar todo con ella.
Prepara el terreno
Te explicamos anteriormente algunos detalles sobre el dibujo más claro u oscuro, pero en este segmento iremos todavía más a profundidad para explayarnos en cuanto al dibujo con acuarela en superficies que son bien húmedas y otras más bien secas. Porque conociendo esto, podrás preparar el terreno perfectamente para que tus pinceles estén preparados.
En el primer caso, cuando deseas hacerlo en una superficie con humedad, te recomendamos que tengas a tu pincel bien mojado y sobre todo luego pasarlo por toda el área en donde vayas a dibujar para crear desde ya el efecto mojado que tus ojos perciben, aunque en realidad no lo están, sino que será humedecido nada más, sin ir más lejos para evitar problemas. Recuerda que para que esto se logre con la consistencia correcta, no tienes que empapar demasiado tu pincel.
Otro punto a destacar es el caso de las superficies secas, las cuales se van a preparar mediante un pincel un poquito húmedo nada más, cuánto mucho algunas gotas sobre este. Luego deberás de combinarlo con la pintura que vayas a usar y bastará para que uno se mezcle con el otro, pero donde el agua no interfiera para nada y que tu superficie siempre esté muy seca.
Primero los claros y luego los oscuros
En esto de pintar no se trata de simplemente ir por allí lanzado colores sin ninguna elección previa, aquí en este sentido te explicaremos todo lo que hace falta para que entiendas un proceso tan importante como lo es una clara elección vital para cualquier pintor o dibujante.
Recuerda que una vez que apliques la acuarela, ya no hay vuelta atrás, o te gusta o simplemente tíralo y empieza en un nuevo lienzo. El truco reside en escoger primero los colores más claros y que poco a poco le vayas agregando los colores más fuertes. Esto tiene una finalidad muy clara y se trata de la corrección.
Una vez que hayas iniciado con estos colores más débiles, entonces al momento de corregir simplemente tendrás que aplicar ciertas capas de los claros o incluso algunos optan por echarle encima los colores más oscuros y tapar el problema.
Ahora es cuando más es menos
Siempre que seas un principiante te tocará el gran paso de aceptar que tienes que calmarte en la escogencia de colores y en su uso, cuando aprendes esto es momento de que añadas más de lo necesario y te explicaremos cuándo usar este recurso tan necesario en lo referente a las técnicas adecuadas para el dibujo con acuarela.
Como la acuarela es un tipo de material que usualmente no suele ser muy fuerte por más colores que apliques, entonces deberás de agotar eso de usar más acuarela de la necesaria debido a que como generalmente se le suele mezclar con un poco de agua, va perdiendo consistencia y por eso se desvanece su color final y en algunos casos si no lo has hecho de forma correcta, terminarás por dejar a tu lienzo sin un esquema claro.
Nuestra recomendación es que mezcles más y más colores hasta que notes que en tu lienzo hay una muy buena base y fuerza en el dibujo, de esta forma no te quedarás sin nada al momento de culminar, recordando que una vez esto sucede ya los dados están echados, por eso volvemos a recalcar el usar más acuarela de la que necesitas hasta que lo veas por ti mismo.
Corrigiendo errores fácilmente
El mundo de la pintura muchas veces suele crear errores si no estás pendiente de lo que tienes al frente tuyo y este es el punto en donde nos agradecerás porque la corrección debe ser parte de tus ases bajo la manga siempre que te equivoques, de lo contrario prepárate para asumir errores infantiles sin esta guía.
Primero lo primero, si observas que tu dibujo carece de vida o por el contrario no has podido plasmar bien tu imagen mental y deseas dar marcha atrás, podrás hacerlo primero utilizando una superficie suave y húmeda ¿Cómo cuál? Pues con un pañuelo pequeño que se humedece. El proceso será bastante sencillo, tendrás que empezar a pasarlo por toda la acuarela que no desees y posteriormente ese exceso se irá retirando progresivamente en cuestión de segundos.
Si quieres hacerlo mediante otro método un poco más drástico o si tu acuarela está a punto de secarse, te recomendamos que uses cualquier tipo de cepillo de dientes que luego vas a humedecer como en el primer ejemplo y poco a poco retirar el exceso que te molesta. En cualquier caso, la máxima es que nunca dejes que la acuarela se seque, ya que en ese escenario no tendrás nada que hacer más que empezar desde cero en otro lienzo.